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DolliPod

O cómo utilizar las máscaras de capa en beneficio propio. O cómo utilizar las máscaras de capa; explicación ilustrada con una clonación de iPods mágica. O cómo poner un título horrendo y una introducción aún peor.

Voy a hacer realidad uno de mis sueños húmedos gracias al potochó. No, intrascendencias no se ha convertido en erotoesencias, no. Simplemente, voy a realizar el milagro de los panes y los peces, sólo que con iPods, que es más moderno. Y de paso, cuelo un ejemplillo de cómo usar máscaras de capa para ocultar o mostrar sólo una parte de una imagen. Por intenciones que no quede.

Lo primero es recopilar el material:

  1. Cámara.
  2. Trípode.
  3. Disparador remoto.
  4. iPod.
  5. Un par de kekos para darle gracia al asunto.
  6. Un soporte donde colocarlo todo. Mismamente el sofá.
  7. Un par de petisuises (o nanoninos, que creo que es el nombre trénico) de choco. El arte da hambre. Y si no, que se lo digan a cualquier artista. Una cucharilla. Para los petisuises (o nanoninos).

Pues sí, hace falta un trípode. Porque lo que voy a hacer, sin red y ante sus ojos, es realizar varias fotografías del iPod en distintas posiciones sobre el sofá, para luego “recortar” el cacharrín de cada una de ellas, y juntarlo todo en una sola. Y para eso, hay que conseguir que la cámara no se mueva entre disparos.

El proceso tendrá dos partes, por tanto. Primero hay que hacer las fotos, y luego hay que pasar un rato de sana diversión, de ésa que tanta falta hace a la juventud, con el potochó.

La primera parte es sencilla. Para conseguir que todas las fotos sean consistentes, lo mejor es poner la cámara totalmente manual, tanto la velocidad y la apertura, como el enfoque. A partir de ahí, se coloca el iPod en un sitio, y se le hace una foto. Se cambia el iPod de sitio, y se le hace otra foto. Se vuelve a cambiar de sitio, y otra foto. Y así. Todas las fotos, claro, con el disparador remoto, para evitar que la cama se mueva lo más mínimo. Vean los tres originales:

Original1

Original2

Original3

Eso sí, si se quiere que el proceso de montaje final sea lo más sencillo posible, es preferible intentar que las posiciones del iPod no se solapen entre sí.

Una vez terminadas las fotos, se pasa a la segunda fase. Se vuelcan al ordenador, y se abren las dos primeras de la serie en fotochó. Yo voy a trabajar sobre la primera de la serie, en la que voy a ir añadiendo capas, cada una con otra de las fotos.

Para empezar, simplemente, arrastro el contenido de la segunda foto sobre la primera. El propio fotochó, que es un listillo, se encarga de crear la capa nueva.

Multi Dos Capas

Ahora, creo una máscara para la capa superior, haciendo clic en el botón de máscara de capa.

Multi Mascara Capa

Y ahora, simplemente tengo que pintar con negro sobre las partes de la capa que quiero que sean transparentes, en mi caso, todo lo que no sea el iPod. Para pintar en la máscara, he elegido un pincel de dureza 0%, que me dejará bordes suaaaaaaaves, y de un tamaño tirando a grande, que quiero acabar rápido para atacar los nanoninos cuanto antes.

Multi Pintando Mascara

Y ya no hay más que comenzar el proceso otra vez con una imagen nueva (colocarla en una capa nueva, crear la máscara, pintar en la máscara). Si las fotos se han hecho de forma que los objetos no se solapen, no es necesario ser extremadamente cuidadoso con contornearlos al píxel, se puede dejar algo de lo que los rodea.

Clonar Mascara

En este caso es incluso conveniente dejar opaca la zona de la sombra.

Oigo sus preguntas: ¿porqué he eliminado el sobrante de cada foto con máscaras, en vez de con la goma de borrar, por ejemplo?. Pues porque es una edición no destructiva. Siempre puedo volver a pintar en una máscara con negro si quiero volver a hacer opaca alguna de sus zonas. Sin embargo, si borro algo, borrado está.

Para finalizar, un par de ajustes (niveles y curvas), una pasada por EasyFrame para poner un marco fetén, y a publicar el posti. Y a chulear de iPods.

Clonacion